El reciente hallazgo de restos
humanos en la zona arqueológica de Marcavalle, ubicado en el centro de la
ciudad del Cusco, sería el más importante desde el 2013, cuando comenzó el
proyecto de excavación que ejecuta la Dirección Desconcentrada de Cultura de
Cusco.
La arqueóloga Luz Marina Monrroy
Quiñonez, directora de la investigación, manifestó a la agencia Andina que bajo
unos 40 centímetros de tierra permanecía enterrado por 3,000 años un personaje
importante por las evidencias arqueológicas halladas en Cusco.
En el terreno que ahora es parte
del Centro Juvenil de Diagnóstico y Rehabilitación de Cusco, cercana a la vía
más transitada y principal de la ciudad, se encontró el contexto funerario de
un joven de 19 años aproximadamente en posición arqueada.
La especialista especificó que
el cráneo tiene modificaciones y está asociado a una lámina o abalorio de oro
en un 90 %, plata 9 % y bronce en 1% y, “sería un personaje importante de una
de las culturas preinca”, como lo fue Macavalle en el valle de Cusco.
Muy cerca se encontró el
entierro de un camélido sudamericano, que sería la más antigua en esta región,
en forma de ofrenda al personaje, al estar en un pozo circular con elementos
líticos, parte de una configuración que cada vez se deja descubrir más.
“Es el hallazgo más importante
que tenemos ahora, podríamos pensar (que es el Señor de Marcavalle), hasta
donde se ha visto tiene en el cráneo una deformación para la época y el estar
asociado a esta placa (lámina) de metal, que es un abalorio, serían datos”, explicó.
Otro joven
También se encontró, unos metros
más allá, el contexto funerario completo de un joven un poco mayor que el otro,
en posición extendida lateral. En esta unidad de excavación o área se hallaron
asociados diferentes materiales culturales, hasta piezas de obsidiana o vidrio
volcánico (puntas de proyectil).
Monrroy Quiñonez explicó que se
descubrieron evidencias de un taller lítico, con artefactos de piedra y
molienda, segmentos de arquitectura compuestos por recintos, muros de piedra y
restos de una plataforma elevada, propias de la época.
A los valiosos hallazgos se
suman fragmentos de cerámica decorada, pintada, con incisiones de rostros
humanos, aplicaciones en asas de vasijas, instrumentos de hueso, restos
carbonizados de productos agrícolas, morteros de piedra y piezas metálicas de
uso doméstico.
El proyecto de investigación
arqueológica de Marcavalle fue programado hasta fines de este año como parte
del convenio de cooperación entre la Dirección Desconcentrada de Cultura y la
Corte Superior de Justicia de Cusco, para recuperar el patrimonio cultural de
esa zona.
Esta labor se desarrolla desde
el 2013 en un área de 28,000 metros cuadrados y hasta el momento se exploró
solo un 3 %, en el primer año se encontraron tres contextos funerarios, pero el
reciente hallazgo sería el más importante. Los bienes hallados pasarán al
Departamento de Antropología Física para los análisis.
Fuente: diario Perú 21.